Educación financiera vía mensajes de celular

El proyecto PoupeMais –AhorreMás en portugués– se pondrá a prueba con 10 mil titulares de cuentas corrientes bancarias, beneficiarios de programas sociales del gobierno brasileño

Por Suzel Tunes  |  FAPESP Investigación para la Innovación – La utilización de una tecnología simple y barata para realizar proyectos innovadores de transformación social parece una ser una misión utópica, pero ha sido ésta la receta del éxito de la startup MGov Brasil. Esta empresa brasileña, creada en 2012 en el estado de São Paulo, ha desarrollado herramientas de gestión para órganos públicos, institutos y fundaciones utilizando mensajes de texto de celular (SMS) como forma de recabado y envío de datos. Ahora, con el apoyo del Programa de Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (PIPE), de la FAPESP, apunta a dar un paso al frente al desarrollar su propio sistema de envío de mensajes.

Este proyecto, que recibió el nombre de PoupeMais [AhorreMás en portugués], fue inscrito directamente en la Etapa 2 del PIPE. La experiencia adquirida en iniciativas anteriores por Guilherme Lichand, investigador responsable y socio fundador de MGov Brasil, permitió que la empresa solicitase el apoyo para el desarrollo del sistema SMS con el que se concretará el envío de mensajes de educación financiera y la recolección de los resultados.

A comienzos del año que viene, investigadores de MGov Brasil también concretarán el análisis del impacto de esos mensajes sobre las decisiones de consumo, crédito y ahorro de los destinatarios, prioritariamente beneficiarios de programas sociales del gobierno. Al concluir el proyecto, los socios de la empresa –Lichand, Rafael Vivolo y Marcos Lopes– pretenden tener en sus manos un producto destinado a la educación financiera que pueda comercializarse con órganos gubernamentales y con el sector privado, con el propósito de formar hábitos financieros más sanos y reducir el endeudamiento de la población de bajos ingresos.

El uso del celular como herramienta de envío y recabado de datos es estratégico. “La recolección datos cara a cara resulta carísima. Puede costar entre 3 y 10 veces el costo de una entrevista vía celular”, dice Lichand. Y el teléfono móvil cuenta con la ventaja adicional de que se encuentra presente en alrededor del 93% de los hogares brasileños, según datos de la Investigación sobre el Uso de Tecnologías de la Información y la Comunicación en los Domicilios Brasileños (TIC Domicilios) de 2016.

Pero esta alternativa tiene también una limitación: el 46% de los domicilios brasileños aún no tienen acceso a internet, según apunta la misma investigación. En la zona rural, este índice puede llegar al 74%. Y el 65,5% de las líneas activas aún son prepagas, según datos de la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel), de agosto de 2017. De este modo, los investigadores optaron por el SMS y por llamadas de voz con cobro invertido. “Se trata de una funcionalidad disponible en cualquier aparato y que no requiere que el usuario tenga créditos para recibir el contenido o para interactuar con el sistema”, explica el economista.

Un desafío por vencerse es el de llegar al público objetivo. El hecho de contactarse con números de celulares sin el previo consentimiento no sólo constituye una práctica prohibida por la Anatel, sino que también tiene una baja tasa de respuesta. En proyectos anteriores, la solución consistió en entablar colaboraciones con organismos públicos, a través de los cuales se invita a los usuarios a participar en la investigación.

Para el desarrollo del proyecto PoupeMais, MGov Brasil está enviando mensajes de educación financiera a 10 mil titulares de cuentas corrientes del banco estatal Caixa Econômica Federal que a su vez son beneficiarios de uno de los principales programas sociales del país: el Bolsa Familia. En abril de este año, la startup fue contemplada en marco del programa Desafío de Negocios de Impacto Social, realizado por Caixa en colaboración con la organización no gubernamental Artemísia. MGov Brasil fue una de las cinco empresas seleccionadas entre 460 que participaron en este programa destinado a crear soluciones en educación y servicios financieros destinados a la población de bajos ingresos. De este modo, pudo poner a prueba el proyecto piloto desarrollado con el apoyo de la FAPESP en una situación real.

“Los titulares de cuenta bancarias quedaron divididos en dos grupos: la mitad empezó a recibir los mensajes durante la segunda quincena de octubre y la otra mitad los recibirá al cabo de seis meses. Será posible comparar el impacto de los mensajes sobre los datos bancarios de esas personas analizando el saldo y el nivel de endeudamiento”, explica Lichand.

En los proyectos anteriores, MGov Brasil utilizó un sistema de SMS adquirido a proveedores externos. Actualmente, y gracias al PIPE, la empresa cuenta con un sistema propio. “Las herramientas existentes en el mercado son caras y no hacen ni la mitad de lo que hacemos ahora”, afirma el economista. Lichand explica que el sistema que desarrolló la empresa cuenta con un modelo más inteligente de intento de entrega de mensajes. “Normalmente, si el usuario del celular se encuentra sin señal, la operadora desiste de enviar el SMS. El sistema que desarrollamos nosotros apunta a efectuar la entrega en otros momentos del día. El SMS queda en la casilla de salida hasta el momento en que haya señal.”

Pero el desarrollo del propio sistema demandó más tiempo que el que los investigadores imaginaban. “Fueron muchas idas y vueltas con los proveedores hasta que llegamos a la actual solución. En el futuro me encantaría contar con desarrolladores internos”, dice Lichand.

Con el sistema listo para su puesta en práctica, el proyecto culmina la Etapa 2 del PIPE en enero de 2018, y los investigadores esperan obtener en la Etapa 3 del Programa los recursos necesarios para estructurar una estrategia de comercialización y un equipo comercial completo, además de concretar viajes y contar con un soporte operativo.

Un premio a la innovación

Iniciativas anteriores de la empresa indican que esta herramienta puede tener un impacto efectivo en la gestión de políticas públicas y en la vida de la población. En 2013, al desarrollar su primer proyecto –para la Secretaría de Planificación y Finanzas del Estado de Rio Grande do Norte–, Guilherme Lichand obtuvo resultados significativos.

“Rio Grande do Norte contaba por entonces con el programa de distribución de leche más antiguo de Brasil, que atendía a 150 mil familias diariamente. Pero existía la sospecha de que la leche no llegaba efectivamente a la gente que la necesitaba y que muchos beneficiarios la revendían para complementar sus ingresos. La gobernación del estado necesitaba definir si seguía destinado recursos a ese programa o si debería reasignarlos, destinándolos a otra política pública con impacto real”, recuerda Lichand.

Durante tres semanas, y con el apoyo de la gobernación, los investigadores entrevistaron a 1.000 beneficiarios de 40 municipios. En el marco del propio programa de distribución de leche, se invitaba a los asistidos a participar en el estudio, con la ventaja de que ganaban créditos en el celular prepago los que aceptasen. “Obtuvimos un 70% de participación en la investigación con un costo que no llegó a los 50 centavos por beneficiario”, dice el investigador.

Los datos se recabaron mediante el empleo de un sistema de voz automatizado. La grabación del mensaje de voz se realizó con acento local para generar empatía, y los oyentes respondían la encuentra únicamente ingresando números: el 1 ó el 2 para determinar el sexo, notas de 0 a 10 para evaluar el servicio, etc.

“Al final de la investigación, por primera vez en 20 años, la gobernación del estado contaba con un diagnóstico del programa”, afirma el investigador. Y el mismo no fue demasiado positivo. Según Lichand, el programa en líneas generales era muy malo: fallaba al atender a quienes lo necesitaban realmente. Con todo, la evaluación fue mejor en los municipios donde el programa de distribución de leche contaba con una gestión local. Estos datos le permitieron a MGov Brasil sugerir su descentralización. El estado de Rio Grande do Norte la implementó y lo hizo ganar en eficacia.

Los resultados de este proyecto le redituaron a Guilherme Lichand proyección internacional: en 2014 fue seleccionado por la revista Technology Review, del MIT (el Instituto de Tecnología de Massachusetts) para integrar la lista de los 10 brasileños con menos de 35 años de edad más innovadores del país. Ahora espera llevarles esta solución tecnológica a otros gestores públicos, al tiempo que sigue con su trabajo como investigador científico. Con doctorado en Economía Política y Gobierno por la Universidad Harvard, Lichand cree que el espíritu emprendedor y la investigación científica se complementan. En el horizonte del investigador y empresario se ubica la construcción de una sociedad más justa.

Empresa: MGov
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